Reafirman el compromiso de trabajar con el cariño y entrega que les caracteriza en la formación de los más pequeñitos de la comuna.
El Día de la Educación Parvularia y de la Educadora de Párvulos se celebra en Chile desde 1991, instaurando el 22 de noviembre de cada año como forma de destacar el importante rol que cumplen estas profesionales en el sistema educativo nacional, siendo un eslabón fundamental en el desarrollo de la primera infancia.
En Los Andes, durante las últimas semanas de noviembre tanto los jardines infantiles, escuelas, instituciones y servicios que se dedican a la primera infancia, prepararon diversas actividades que se desarrollaron en los establecimientos, Plaza de Armas o en el Parque Urbano, como una forma de realzar y visibilizar el trabajo de cada educadora y de los protagonistas por estos días: los párvulos.
Dentro de las actividades realizadas estuvo el reconocimiento del municipio andino a las educadoras de párvulos que se desempeñan en el Departamento de Educación Municipal DAEM; una instancia para reencontrarse, compartir y reafirmar el compromiso de trabajar con el cariño y entrega que les caracteriza, en la formación de los más pequeñitos de la comuna.
El alcalde de Los Andes, Manuel Rivera, entregó su saludo: “son un eslabón fundamental, si tenemos buenos indicadores y resultados en los distintos establecimientos es porque hay una buena formación desde el primer nivel que es la educación parvularia”. María Soledad Reinoso, directora DAEM, agregó: “para nosotros es un desafío cada año recibir a nuestros pequeños pero es un orgullo cuando terminan y pasan a los procesos de la escuela puesto que significa que ha habido un acompañamiento y una entrega de valores de sistema de estructura para que puedan ir avanzando”.
Jacqueline Villalobos es educadora de párvulos de la Escuela El Sauce, de donde es exalumna, por lo que quiso regresar a su unidad educativa para trabajar con los niños: “lo más lindo es verlos grandes después, y que muchos de ellos después siguen la misma carrera que uno”. Roxana González es educadora de la Escuela Ferroviaria, también señala: “entregar a los niños a la enseñanza básica es lo más reconfortante, verlos crecer y entrar a la educación formal”.
En tanto Carolina Espinoza, educadora de párvulos del Jardín Infantil Cuncuna Rayito de Luna, declaró: “es muy emocionante ver cuántos años han pasado, volver a ver a los niños grandes, con la magia que ellos nos transmiten y poder trabajar con ellos como equipo es genial”.